Ayer estuve comprando cositas para hacer manualidades con Martina y compré esas bolsitas en las que vienen plumas. lentejuelas, ojos, etc y un paquete de 6 plastilinas. Me hicieron la tarde, nos la pasamos increíble.
Mi plan era hacer monstruos de plastilina, pero Martina decidió jugar con las plumas haciéndome cosquillas en los pies. Aproveché su iniciativa y le hice cosquillas yo a ella en distintas partes de su cuerpo reforzando partes del cuerpo que normalmente no menciona como axilas, talón, tobillo.
Hizo lluvia con los limpiadores de pipas, a demás de antenas de marciano.
Se puso los ojitos en sus ojos y en el ombligo, estuvo muy divertido y ocurrente.
Me encanta como las cosas no salen como uno las planea. Fue un momento muy lindo de complicidad, amor y risas.
Hoy por la mañana sí hicimos los monstruos, fue una delicia.
Con este juego potencias su creatividad, plasticidad y motricidad fina. Para motricidad va genial porque tienen que trozar la plastilina, hacer bolitas, aplastarlas. A demás coger los ojitos pegarlos, con un punzón hacer la boca, pinchar las plumas. Es bastante completo. Creativamente me fascina porque quien dice que una cara solo tiene 2 ojos? Los monstruos tienen los que uno quiera y más. Todo funciona en un monstruo, así que no hay errores. Eso me encanta!
Puedes reforzar los colores, las partes del rostro en cuanto a lenguaje.
Martina está con los números ahora y esto me ayuda a enseñarle a contar, por ejemplo el número de ojos que colocaremos en el monstruo.
En fin con muy pocas cosas, no muy caras puedes pasar un rato diferente, bien divertido y cargado de enseñanzas para tu peque. A nosotros nos funciona muy bien. El próximo paso será hacerlas en cerámica en frío para que nos queden y así hacer historias de monstruos!!!