Aprovecho este día, 8 de marzo para escribir este post. Este es mi compromiso contigo mi pequeña guerrera.
Siempre creí que la felicidad viene de la mano de la libertad y que ésta sin valentía es difícil de lograr. Van totalmente de la mano.
Me comprometo contigo Martina.
Me comprometo a criarte en libertad. En esforzarme día a día para criarte valiente, empoderada, que seas tú quien dibuje la línea en donde están tus limitaciones y no los demás.
Me esforzaré en lograr el equilibrio perfecto para darte el espacio que necesitas y estar siempre presente para tí. Tu serás la dueña de tus sueños.
Te motivaré a que pruebes, explores, te equivoques, que asumas las consecuencias de tus decisiones. Para ser libre debes ser valiente pero también debes ser consciente, constante y consecuente.
Intentaré enseñarte que el error no es algo malo si sacamos lo positivo de ello.
Te alentaré a pedir ayuda cuando sea que la necesites. Que pedir ayuda no es signo de debilidad, al contrario es reconocer nuestras limitaciones y eso nos hace humildes y grandes.
Sobretodas las cosas quiero que seas fiel a tí misma, que no busques aparentar ser alguien especial. Tu ya eres especial.
Espero poder lograrlo, espero poder criarte libre, enseñándote a pensar y no a obeceder; enseñándote a crear y no a imitar; enseñándote a amar sin límites y aprendiendo a decir que no cuando sea necesario.
Martina, te quiero libre y valiente. SIEMPRE.