Lasagna de espinacas, champiñones, tomate y salsa blanca

Me desperté con el antojo de comerme una lasagna así que  les traigo una receta ligera, de sabores suaves, riquísima y súper nutritiva.

Ingredientes:

• 3 tazas de hojas de espinca bebé
• 1 cebolla blanca
• 3 dientes de ajo
• 1 lata de tomates pelados
• un puñado de champiñones
• pasta instantánea para lasagna
• queso parmesano
• 1/2 taza de crema de leche
• 1 taza de leche
• 2 cucharadas de mantequilla
• 1 cucharada de harina
• sal, pimienta, nuez moscada y laurel

Preparación salsa de tomate y espinacas:

• Picar la cebolla y el ajo muy chiquitos y hacer un sofrito junto con una hoja de laurel para aromatizar.
• Agregar los champiñones previamente cortados en láminas.
• Retirar el jugo de los tomates en lata y picar los tomates en dados. Introducir al sofrito y reducir.
• Picar las espinacas previamente lavadas y agregarlas a la salsa.
• Salpimentar
• Cocinar hasta que la salsa quede espesa, no nos conviene que tenga mucho líquido.

Preparación de la salsa blanca:

• En un olla derretir la mantequilla y agregar la harina. Con una cuchara de madera remover para que ésta no se queme. Debemos cocinar la harina hasta que esta comience a hacer unas pequeñas burbujas y dore un poco. Si no hacemos este paso la salsa tendrá sabor a harina cruda.
• Agregar la leche y la crema de leche previamente calentadas. Si la agregamos fría es posible que la salsa nos quede con grumos y no queremos eso. Remover siempre con un batidor de mano.
• Agregar nuez moscada y queso parmesano (a gusto, yo puse un par de cucharadas)
• Cocinar hasta que comience a espesar, por favor siempre removiendo.

Armado de la lasagna:

• En un pirex colocar un poco de salsa blanca  en el fondo, luego la primera lámina de lasagna. No recomiendo comenzar con pasta de lasagna porque se pega mucho al fondo.
• La siguiente capa colocar salsa de tomate y espinca y sobre esta un poco de salsa blanca y otra vez láminas de lasagna.
• Repetir la operación hasta que nos quedemos sin salsa.
• La parte de arriba yo les recomiendo solo salsa blanca y full queso parmesano para gratinar al final.
• Hornear a 200ºC por 20 minutos y luego gratinar unos minutos más con el dorador.

 

Es una receta para 4 que no coman mucho. Para 3 que se sirven bien está perfecto!

 

Galletitas avena, dátiles y pecanas

Se viene la navidad y siempre provoca tener cosas dulces y ricas para compartir en estos días. Tenemos visitas inesperadas o simplemente nos provoca tomarnos algo rico con un dulce. Este fin de semana preparé estas galletas de dátiles y pecanas que están de muerte y son re fáciles de hacer.  Casi no te tomarán tiempo en preparar así  como tampoco en comer.

Crujientes por fuera, no tan dulces a pesar de los dátiles y son un snack lleno de energía y nutrientes para nuestros pequeños.

Ingredientes:

• 1/2 taza de mantequilla
• 1/2 taza de panela
• 3/4 tazas de avena en copos
• 1/3 taza de leche (la de tu preferencia, puede ser de vaca, almendras, soya)
• 1 taza de harina cernida
• 1 cdta de polvo de hornear
• 1 pizca de sal
• 1/2 taza de dátiles frescos picados
• 1/2 taza de pecanas picadas

Preparación:

• Pre calienta el horno a 350F o 175ºC
• Batir la mantequilla hasta que esté bien cremosa y añadir la panela. Continuar batiendo.
• Mezcla la avena con la leche e incorporala con una cuchara de madera a la mantequilla y panela.
• Incorpora poco a poco el resto de ingredientes mezclando bien con la cuchara hasta que se integren bien.
• En un placa de horno enmantequillada con la ayuda de una cuchara arma tus galletitas. Una vez tengas colocado el montoncito de masa ayúdate con un tenedor para aplastarlas y hacer una decoración en cruz.
• Hornear por 15 minutos aproximadamente.
• Dejar enfriar y disfrutar!

Preparar galletas es la excusa perfecta para iniciar tus hijos en la cocina.

Ellos se divierten mucho con la masa, ayudando a armarlas, decorarlas, etc.

No sólo compartimos un lindo momento con ellos, los ayudamos a ser autónomos y les enseñamos sobre alimentación. Hay millones de recetas de galletas saludables que podemos tomar como pretexto para introducir nuevos alimentos a su dieta.

 

 

Cous cous con guiso de garbanzos con toques marroquíes

Mis amigos marroquíes me van a disculpar porque como su cous cous no hay! El mío es muy a mi manera pero recuerda vagamente a esos ricos cous cous marroquíes.

Ahora, en la madriguera ya no sólo nos tenemos que preocupar de la alimentación de Martina, sino también del bebé en camino. Es sumamente importante alimentarse bien durante el embarazo. Alimentos ricos en hierro, proteínas, acido fólico y la lista continúa. Los garbanzos son una excelente alternativa para las mamis embarazadas.

Contienen proteínas, hidratos de carbono, fibra, vitamina B y minerales. También son una buena fuente de ácido fólico escencial para el desarrollo del sistema nervioso de los bebés.

Son fuente de minerales como el hierro, geniales para combatir la anemia que siempre está acechándonos durante el embarazo. Tienen calcio, magnesio y manganeso geniales para el desarrollo de los huesos en el feto.

 

Ingredientes:

• 1 lata de garbanzos cocidos al natural (yo uso así porque sino me tardo la vida hirviendo los garbanzos hasta que queden blandos)
• 1 cebolla roja
• 2 dientes de ajo
• 1/4 pimiento rojo
• 1/2 calabacín
• 1 zanahoria grande o varias chiquititas
• 6 champiñones
• 3 tomates
• 1 cdta miel
• 1 pizca de canela
• sal y pimienta a gusto
• 1 cdta pimentón dulce o paprika
• 1 cúrcuma
• Cranberries secos
• 1 taza de couscous

Preparación guiso de garbanzos

• Picar la cebolla, el ajo y el pimiento muy chiquito y sofreír en una sartén bien caliente con un chorrito de aceite de oliva.
• Picar la zanahorias en  rodajas finas, el calabacín en dados pequeños y los champiñones en láminas. Una vez la cebolla esté blanqueada agregar todos estos vegetales. Dorar.
• Pelar los tomates y licuarlos. Agregar a los vegetales una vez estos estén dorados.
• Rallar la cúrcuma y añadir junto con la miel, canela, pimentón, sal y pimienta.
• Cocinar un par de minutos para integrar todos los sabores y agregar los garbanzos y los cranberries secos.
• Remover y cocinar por 2 minutos más.

Preparación del cous cous

• Mide una taza de cous cous y colócala en un bowl. Añade sal, pimienta y un chorrito de aceite de oliva.
• Hierve una taza de agua y agrega al couscous. Tapar el bowl y dejar reposar unos cuantos minutos. Una vez el agua se haya abosrbido desgranar con un tenedor para que te quede bien suelto.
• No tiene pierde, es súper sencillo y rápido!

 

 

Las madres debemos aprender a escuchar

He leído infinidad de posts, de memes, frases hechas sobre cómo nadie debe «meterse»  o «criticar» en la forma como criamos a nuestros hijos. Como madre primeriza y persona que le cuesta mucho aceptar la crítica di por sentado que solo su padre y yo sabíamos lo  que era mejor para nuestra hija. Una crítica destructiva jamás debe ser aceptada, pero debemos aprender a diferenciar las críticas de los consejos. Es fácil confundirlos.

Yo, como madre primeriza (y creo que a muchas les ha pasado) me leí muchos libros de crianza, muchos posts, muchos artículos sobre el apego, baby led weaning, colecho, porteo, y la lista sigue y sigue. Leí mucho, es verdad pero mi experiencia seguía siendo nula. Podría contestar lo que se me preguntara en «teoria» pero la realidad es otra. Muchos tiros me han salido por la culata.

Cada niño es un mundo, un manual o un libro pueden orientarte pero nunca deben seguirse a raja tabla. Debemos aprender a ir más con la corriente. Debemos aprender a escuchar las voces de la experiencia, que muchas veces sentimos que son críticas pero la mayor parte del tiempo solo buscan darnos una mano. Los consejos los solemos tomar como ataques porque nos tomamos las cosas muy personales y no vemos con claridad. Es imporante escuchar lo que otros tengan para decir, más allá si compartes o no su punto de vista. Muchas veces por cerrarte en banda te pierdes de mucho.

Por otra parte tenemos al instinto, esa arma de doble filo. Por un lado es maravillos confiar en él, te salva de muchas. Pero en otras ocasiones te la juega. Por ejemplo, a veces pecamos de sobreprotectoras y eso puede ser muy peligroso a largo plazo. Hay que aprender a escuchar el instinto y saber cuando se está pasando de la raya.

La experiencia solo te la da el tiempo y en el camino nos vamos a equivocar mucho y muchas veces por seguro. Yo en estos dos años me he equivocado muchísimo y lo más triste es que me costó reconocer muchos de esos errores por cerrarme a escuchar la «crítica». Finalmente cuando vi que las cosas se me salían de control  (es una pena tener que llegar a este punto) decidí escuchar y entender que las «críticas» no me hacen una mala madre, aceptarlas y analizarlas me hacen una mejor madre que deja de lado su orgullo para educar y criar a su hija de la mejor manera posible.

Ser padre o madre no es tarea fácil. Es buscar el equilibrio perfecto entre ternura y firmeza. Es crecer junto con tus hijos. Es enseñar y aprender. Es jamás darte por vencido.

Helado casero de plátano, mantequilla de maní y cacao

Está empezando el buen clima y la verdad que no hay cosa que le guste más a los pequeños de la casa que el helado. Hoy, les comparto una versión casera y súper sana de helado. Se prepara en 5 minutos y se devora en menos de 1.

En invierno a mi me encanta prepararle a Martina un milkshake de leche, mantequilla de maní y cacao. Yo compro la semilla de cacao molida sin azúcar en el mercado. Ese es el que uso, pero pueden usar el cacao de su preferencia. Ahora que hace calor probé esta versión para variar su merienda un poquito. Fue un éxito!

Ingredientes:

• 2 plátanos bizcocho congelados
• 1 chorrito de leche (puede ser la que tu prefieras)
• 1 cucharadita de mantequilla de maní

Preparación:

Todo a la procesadora hasta que quede cremoso.

A servir y disfrutar!

Martina no dejó nada!